28 de marzo de 2024

Los pescadores despejan su futuro

Satisfacción generalizada entre los pescadores ante un cambio normativo que permite continuar con una práctica habitual como es la pesca deportiva. El Congreso aprobó este pasado  jueves la reforma de la Ley del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad.

El Tribunal Supremo dictó en 2016 una sentencia por la que modificó el catálogo español de especies exóticas invasoras. Ese catálogo había sido recurrido por diversas asociaciones ecologistas. Se incluyó a la carpa, entre otras especies piscícolas. Las consecuencias inmediatas era la prohibición de criar y comercializar estas especies para la venta o, en el caso de los peces, para soltarlas en los ríos y obligaba a los pescadores deportivos que se hicieran con ellas a no devolverlas al agua. Además, obligaba a la Administración a erradicarlas por los daños que ocasionan «a la fauna autóctona, medio ambiente y ecosistemas».

Esa prohibición afectaba tanto a la práctica deportiva en sí (no se podría pescar, ni siquiera sin muerte), como a las piscifactorías. Los colectivos ecologistas aplaudían la medida pero las asociaciones de pescadores, colectivos del sector y comunidades estaban en contra.

El anterior Ejecutivo  propuso la reforma de la ley para ‘indultar’ a esas especies, por motivos económicos y de impacto social, de tal manera que podrán volver a ser capturadas y devueltas al agua como antes de la sentencia del Supremo. Se podrá seguir pescando como siempre se hacía antes de 2007.

El cambio aprobado en el Congreso hace que en el nuevo texto de la Ley de Biodiversidad especies como la carpa, el lucio, la carpa, la trucha arco iris o el cangrejo rojo podrán beneficiarse de excepciones debido al interés que tienen desde el punto de vista cinegético o piscícola.

Han votado a favor del texto PP, Ciudadanos, el PDeCat, el PNV y Foro Asturias, destacando los beneficios económicos y sociales de muchas de las especies en zonas rurales desde hace décadas y el elevado número de empleos y rentas ligados a ellas. En contra, PSOE, Podemos, ERC y Compromís, que han denunciado que se primen los intereses económicos de algunos sectores privados en detrimento del patrimonio natural y alertaron del peligro de entrada de especies invasoras.A partir de ahora, sera cada Comunidad Autónoma la que ajuste su reglamento para la gestión de los cotos de pesca.

Los pescadores ven ahora una salida a este problema después de casi dos años de inactividad que , en el caso de  Pozo Alcón , la repercusión ha sido importante al tener que cerrar el Coto Intensivo de Pesca en Peralta-Río Guadalentín.

 

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